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Estas son las noticias sobre medioambiente que más nos han llamado la atención en la última semana.  Esperamos que las encuentres interesantes.

LAS FICHAS DEL CLIMA

Existen más caminos para mitigar el cambio climático que el que marca la transición energética. Pero este recorrido es, por ahora, en el que más hemos avanzado (aunque sea con timidez). Según un nuevo informe del Foro Económico Mundial, 92 países han progresado en su transición hacia las energías limpias en los últimos 10 años, aunque solo 13 han logrado una mejora sustancial.

En el ranking publicado como parte del informe, el Energy Transition Index 2021, el pódium lo ocupan Suecia, Dinamarca y Noruega. Reino Unido (7º) y Francia (9º) son las dos grandes economías mejor clasificadas, mientras España aparece en el puesto 17, Estados Unidos en el 24 y China en el 68.

A pesar de los avances, la Agencia Internacional de la Energía ha señalado que las emisiones de CO2 subirán un 4,8 % en 2021. El efecto rebote tras la bajada del año pasado estará causado, sobre todo, por el uso masivo del carbón en países como China o la India.

• El Consejo de la Unión Europea, el Parlamento y la Comisión alcanzan un acuerdo para la futura ley climática de la UE. El objetivo más destacado es reducir las emisiones de gases de efecto invernadero como mínimo un 55 % en 2030.

• En las próximas horas, Estados Unidos podría anunciar el objetivo de reducir sus emisiones al menos un 50 % durante esta década. El país vuelve a centrar la atención como anfitrión de la Cumbre de Líderes sobre el Clima, de la que te contaremos más la próxima semana.

• China llega a esta cumbre con el compromiso de alcanzar un acuerdo, pero sus políticas climáticas siguen generando dudas. Un informe señala que el país debería cerrar al menos 600 centrales térmicas de carbón en los próximos 10 años para cumplir los objetivos que se ha marcado.

• Reino Unido también mueve ficha. El Gobierno de Johnson planea establecer por ley el objetivo de reducción de emisiones más ambicioso del mundo: un 78 % menos en 2035 en comparación con los niveles de 1990.

UNA TENDENCIA INNEGABLE

La Organización Meteorológica Mundial acaba de publicar la última edición del informe Estado del Clima Mundial. Lleva 28 años haciéndolo, desde que en 1993 decidió empezar a responder a todas las dudas que planteaba el cambio climático.

Hoy, la tendencia es innegable. El 2020 fue uno de los tres años más cálidos de los que se tiene constancia: la temperatura media mundial fue 1,2 °C superior a la de finales del siglo XIX. Además, los últimos seis años han sido los más cálidos registrados y lo mismo ha sucedido con la última década.

El clima está cambiando rápidamente por la acción humana, amenazando el futuro de la mayoría de las especies del planeta, incluida la nuestra. Estas son las principales conclusiones del estudio:

• El nivel de dióxido de carbono (CO2) en la atmósfera es hoy un 30 % mayor que hace 30 años.

• El océano absorbe una cuarta parte del carbono de origen humano y casi todo el calor que el CO2 retiene en la atmósfera. Como consecuencia, el 80 % del área oceánica experimentó al menos una ola de calor en 2020.

• El nivel del mar ha subido, de media, cerca de 10 centímetros desde 1993.

• El hielo en el Ártico marcó el segundo nivel más bajo desde que existen registros. La Antártida pierde más de 200 gigatoneladas de hielo al año, el doble de la descarga anual del río Rin en Europa.

• El año pasado, las lluvias torrenciales inundaron el Sahel, el Cuerno de África, la India y el Sudeste Asiático. Las sequías prolongadas alimentaron los incendios que causaron importantes pérdidas en Sudamérica y el oeste de Estados Unidos.

• La temporada de huracanes de 2020 en el Atlántico Norte fue la más activa de la historia, como ya te hemos contado en varias ocasiones.

• Durante la última década, los fenómenos meteorológicos provocaron el desplazamiento de 23,1 millones de personas al año, la mayoría dentro de las fronteras nacionales. En la primera mitad de 2020 se produjeron 9,8 millones de desplazamientos, principalmente en el sur de Asia y el Cuerno de África.

LAS ARENAS DEL DESIERTO

El Sáhara es el desierto cálido más grande del mundo. Una vasta extensión de más de nueve millones de kilómetros cuadrados cubierta de arena y polvo de minerales como hierro y fósforo. Cada año, los vientos transportan más de 60 millones de toneladas de estos materiales a través del Atlántico. Muchos llegan a la selva amazónica, en donde actúan como fertilizantes. Otros acaban en el océano, en donde alimentan la vida submarina.

Este intercambio es fundamental para mantener los ecosistemas tal y como los conocemos. Sin embargo, y al igual que tantos otros procesos, se ve afectado por los cambios del clima. Un estudio de la NASA ha analizado cómo el calentamiento global puede generar un efecto dominó en estos desplazamientos de arena.

El cambio de las temperaturas impacta directamente en la velocidad del viento. Cuando el Atlántico Norte se recalienta, los vientos alisios que soplan de este a oeste se debilitan y transportan menos polvo del Sáhara. Además, los cambios de las lluvias en los trópicos favorecen que la arena del desierto se humedezca cada vez más, impidiendo que los vientos se la lleven.

Como consecuencia, hay menos polvo en el aire y la radiación solar llega con más facilidad al océano. De esta forma, se genera un ciclo de retroalimentación: las temperaturas suben, los vientos se debilitan y el movimiento del polvo se reduce, lo que favorece de nuevo el calentamiento. Se explica muy bien en este vídeo.

El estudio de la NASA ha utilizado tecnología y modelos predictivos para intentar pronosticar qué cantidad de polvo se moverá por el Atlántico en el futuro. Sus resultados indican que la actividad se reducirá un 30 % en los próximos 50 años, y seguirá disminuyendo de forma continua a lo largo de este siglo.

Esperamos que te haya gustado esta edición de Planeta Mauna Loa. Si tienes comentarios, no dudes en escribirnos a info@planetamaunaloa.com o a nuestras redes sociales. 

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