Día 2
¿Qué tal ha ido la recopilación de meses? ¿Te ha resultado difícil, has descubierto algún hallazgo que te haya sorprendido?
Hoy queremos hablar de la escritura como una práctica que nos puede ayudar a sentirnos bien. Escribir es compartir la luz y a veces cuesta un poco dejarnos llevar por el agradecimiento.
Siempre ha rondado en el ambiente el papel de la escritura para narrar lo trágico, lo adverso, para adentrarse en la parte más oscura de la vida. Conocemos más que de sobra la figura de la escritora atormentada.
Entonces vamos a dar un paso atrás y a dejar que la escritura deje fluir toda la luz.
¿Y por qué es importante hacer este ejercicio?
Por un lado, porque el cerebro tiende más a recordar lo negativo como manera de defensa y supervivencia, entonces la gratitud se convierte en una práctica, en algo que debemos entrenar.
Y por otro, porque estar agradecidas cambia nuestro enfoque sobre nosotras mismas y con respecto a otras personas o nuestro entorno. Como resultado, nos sentimos más conectadas con los demás, con la naturaleza y con las experiencias.
La consigna de hoy está enfocada en que escribas acerca de las cosas que te han hecho sentir bien.
¿Qué cosas no te pueden quitar de este año? ¿Qué es lo bueno que pasó? ¿Qué capacidades y recursos propios pusiste en marcha?
Así que vas a empezar a escribir con la frase:
La luz de este año ha existido por.....
Déjate llevar por el agradecimiento y recuerda que en nuestras vidas la luz suele estar en las cosas pequeñas, en los momentos fugaces que a veces pasan desapercibidos y que nos traen bienestar.
Escríbelo todo.
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Nos escribimos de nuevo mañana
Ori y Pepa
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