Como otros países, México está encaminado a tomar acciones urgentes para mitigar la crisis climática y cumplir con los objetivos del Acuerdo de París: reducir las emisiones del sector industrial y generar 35% de energía limpia en 2024 y mantener el incremento de la temperatura global para debajo de los 2 °C, haciendo el mayor esfuerzo para no rebasar los 1,5 °C. Para lograr eso, se busca impulsar la transición energética y un cambio en el modelo actual que está basado en fuentes fósiles - como el petróleo y el carbón - apostando por energías renovables como la eólica.
Actualmente, en México hay 70 parques eólicos a gran escala en 15 estados. Uno de ellos es el estado de Puebla, que destaca por su rica diversidad natural y cultural. En esos territorios habitan campesinos, quienes enfrentan las consecuencias ambientales y socioculturales que han dejado estos megaproyectos a años de su instalación. Los pobladores han denunciado el incumplimiento de la empresa y las irregularidades del parque, poniendo a la luz que estos proyectos están lejos de una transición energética justa en México. Esto ya que siguen reproduciendo el mismo sistema de despojo que la industria de combustibles fósiles. ¿Cómo? De esto te cuento en el siguiente artículo.
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