¿Has visto alguna vez sobre un generador compacto que utiliza cáscaras, semillas y ramas para producir energía?
Se trata de una nueva turbina de biomasa que es más compacta y fácil de utilizar. Esta tecnología podría marcar la diferencia para los pequeños productores rurales que viven sin acceso a energía eléctrica o dependen de costosos generadores a diésel en la Amazonia.
La iniciativa nació en 2019 como parte de un proyecto de maestría liderado por Davi Cavalcante, doctorando de la Universidad Federal de Pará. En esta región, a pesar de la abundancia de residuos de la bioeconomía como cáscaras, solo existían generadores de biomasa de gran tamaño, los cuales casi siempre fallaban o requerían mano de obra especializada para su funcionamiento.
Este es solo un ejemplo del potencial que tiene la biomasa para producir energía que vaya en beneficio de comunidades aisladas. La energía renovable generada a partir de la biomasa (materia orgánica de origen vegetal o animal) puede usarse para la cocción de alimentos, iluminación y calefacción, convirtiéndose en una alternativa a los combustibles fósiles.
El problema es que miles de personas dependen del diésel para cubrir sus necesidades diarias, y solo tienen energía una parte del día, lo que afecta directamente su calidad de vida, salud y desarrollo.
Para abordar este problema, el Gobierno federal brasileño lanzó el 7 de agosto el programa “Energías de la Amazonia”, que tiene como objetivo reducir hasta en un 70% el diesel en la matriz energética de la región para 2030. Mientras, investigadores como Davi prueban el impacto de pequeños sistemas de biomasa.
Durante casi 20 años, la biomasa ha sido objeto de estudio en la Amazonía, pero las iniciativas, como la mencionada turbina, enfrentan la resistencia de las empresas del sector energético, las cuales reciben financiamiento para mantener las termoeléctricas que usan diésel.
¿Cómo avanzar en soluciones? Todo indica que se requieren incentivos económicos para la biomasa, combinados con proyectos de formación profesional por parte del gobierno, con el fin de capacitar, por ejemplo, a técnicos electricistas como mano de obra local, para garantizar que las iniciativas funcionen de manera sostenible.
Así, se podría avanzar en la democratización de la energía en los lugares que la necesitan.
Si quieres ahondar más, revisa el siguiente reportaje sobre las alternativas que ofrece la biomasa en la Amazonia.
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